El trabajo híbrido o remoto ha llegado para quedarse después de la pandemia, pero los expertos en ciberseguridad aseguran que no todo es tan bonito como parece. Trabajar desde casa supone ciertos riesgos para la seguridad de las empresas y de la información personal de los empleados.
Una práctica muy habitual entre los empleados es utilizar los mismos dispositivos dentro y fuera de su horario laboral. Una encuesta ha revelado que el 90% de los trabajadores utilizan los ordenadores proporcionados por la empresa para actividades personales.
Algunos usuarios utilizan el ordenador de la empresa para ver una película en Netflix o hacer una compra online, pero otros incluso realizan actividades de riesgo. El estudio ha demostrado que la mayoría de los trabajadores utilizan el PC del trabajo para ver contenido pornográfico, acceder a la Dark Web y consumir deportes de manera ilegal.
El teletrabajo tiene parte de culpa en este cambio de tendencia. Los empleados no realizarían estas prácticas en su oficina, pero la línea entre la vida laboral y personal se difumina cuando trabajan desde su casa. La ciberseguridad de los dispositivos corporativos de forma remota ha pasado a ser una de las principales preocupaciones de algunas empresas.
¿Por qué no deberías utilizar el ordenador del trabajo para temas personales?
El estudio ha determinado que el 63% de los encuestados accedían a la Dark Web semanalmente, y el 17% lo hacían a diario. Esta práctica estaba más extendida entre los hombres, mientras que los trabajadores más jóvenes tenían más probabilidades de conectarse a una red WiFi pública no segura o utilizar dispositivos USB personales.
Los propios usuarios conocen los riesgos de su actividad en el ordenador de la empresa, pero casi un tercio de los entrevistados los ignoran. Los datos incluso van más allá. El 36% de los trabajadores consideran que su jefe ve su actividad personal en el PC como una violación de la privacidad, recoge Tech Radar. Aunque muchos opinan lo contrario: si pueden utilizar el dispositivo en su casa, lo pueden emplear para uso personal.
La seguridad de estos ordenadores es otro de los riesgos a los que se enfrentan las compañías. Los empleados que no tienen acceso a información confidencial o programas específicos de la empresa, podrán recibir un PC sin un software de seguridad. El estudio demuestra que el 18% de los dispositivos no están protegidos y el 7% de los usuarios aseguran que no saben si su ordenador tiene un antivirus.
Fuente -> ComputerHoy